Me quitaron mi niña

(Publicado el 04.07.07)

Me quitaron mi niña
Para dársela a un delincuente

Lic Víctor M. Barranco C.


Es de las que conoce el miedo. De quienes a lomos de la sombra, se ha acercado a la noche. Es de las que ha reprimido el grito, de quien reclama para sí la invención del silencio. Ha descubierto que, como ella, las mariposas sonríen como los mendigos..solo cuando logran compartir su soledad. Cabalgando su encierro entre tabacos, hechicería, sexo, dinero, ha enterrado su ira en los sueños. Tiene una realidad inventada, tres hijos, la hembra secuestrada con la connivencia de algún funcionario también metido en ese mundo de la magia negra. Simple, con la sencillez de lo espontáneo..silente, como las horas que aguardan horas nuevas..pensante, como quien ve barcos grandes navegando irremisiblemente a su mismo puerto sin haber preparado la llegada…lucha por zafarse de esos muertos que, quien fuera su pareja -condenado por estafa y porte de armas de guerra a régimen de presentación- le ha amarrado a su vida de manera tan trágica que, no solo la ha convencido de que son capaces de hacerle daño a ella y su familia si lo deja o lo denuncia…si no, que hasta la ha “casado” con ellos en ceremonias donde el alcohol preside. Por ello, después de dejar la buhonería en procura del amor, después de ser sometida a sexo con los muertos encarnados en su pareja, después de haber sido despojada de un carro y más de 40 millones de bolívares, después de haber sido despojada de su hija de apenas meses por una instancia judicial…después de morirse por dentro, de marchitarse de tristezas, de convertir sus sueños en pesadillas, de salirse del camino de Dios…de vivir solo de noche, de perder la noción de la luz.. de evadirse del sitio aquel donde habitan las sonrisas… en medio de su tragedia, en medio de esa esclavitud personal, sexual, filial a que fuera sometida por varios años..un amigo “de la caravana” le tendió la mano y pudo escapar del encierro…pero sin su pequeña hija. Por lo que hoy no sabe si esconder todas las humillaciones, si guardar todas las miserias aprendidas, si proteger todos los fracasos..o simplemente caminar despacio sobre sus propios despojos y contemplar la guerra ya no desde los sueños si no desde el propio campo de batalla, a fin de mostrarle al mundo que es posible rescatarse del encierro y hurgar de algún modo en el infierno, en el que estuvo…en el que más de una vez, observó de cerca y con horror la existencia del sitio donde van morir todas las cosas. Por ello, comienza a contar el principio de la nada, la historia de lo inexistente, el futuro de lo invisible, el tráfico de la materia…a renunciar al cadáver a cuestas, a la luz de los hospitales, al rincón de la maldad…a guardar la brújula, a olvidar los aquelarres, a escribir los cuentos…a ver si encuentra una alcantarilla para arrojar los cuervos pequeños que la han atormentado y sometido en los últimos tiempos… o un hombro amigo y desinteresado, donde poder aliviar cada noche su miedo.

- Aquí estoy, le digo…como te ofrecí después de tu llamado
- “Gracias Licenciado. No sabe cuánto lo pensé. Pero lo he venido leyendo todos los miércoles, desde el interior del estado donde resido, y creo que a usted le puedo contar mi infierno. Todo lo que he pasado. Todo lo que estoy pasando, a ver cómo me ayuda”.

- Cuéntame…
- “Yo estuve casada con un hombre muy bueno, ahora que me doy cuenta de eso. Con él vendía en el mercado, tuve dos hijos, y reuní un dinero para comprar una camioneta y así ampliar el negocio. No nos entendimos y lo dejé. En medio de esa situación, fui a un sitio a ayudarme. A encender unas velas y a hablar con los espíritus para que me ayudaran en el camino a emprender. A que me mandaran unos baños y a abrirme la suerte. En fin, a despejarme los caminos. Allí lo conocí a él. Buen conversador. Dispuesto ayudarme. Todo un amor. No solo me prestó ayuda espiritual, si no que se hizo mi amigo personal. Me buscaba. Me ayudaba, me escuchaba. Me galanteaba. Hasta que me enamoré de él”.

- Y tú que luces inteligente, trabajadora, echada para adelante ¿no te diste cuenta del verdadero interés?
- “Es que usted no es mujer y no sabe lo que es sentirse halagada, querida, estimada. Que le den cada mañana una rosa….

- Te convenció..
- “Si, como nadie. Me llevó a su casa. Allí había dos mujeres viviendo con él, a quienes me presentó como sus hermanas. Y a unos niños a quienes me señaló eran sus sobrinos..pero que él cuidaba como sus propios hijos. Aunque la actitud de esas mujeres era extraña, no supe hasta mucho tiempo después que eran sus mujeres y no sus hermanas, y que los hijos eran de él con ellas, y no sus sobrinos. Que había una promiscuidad que él alentaba y donde quería me sumergiera a tal punto que ya descubierto me dijo que estaba obligada a vivir con las otras dos mujeres, y dormir todas con él en el mismo cuarto”

- ..Pero
- “Espere que le siga contando Licenciado…comencé a asistir a sus sesiones. Allí había un grupo de seguidores a quien el denominaba “la caravana” a quien sacaba plata dizque para los materiales y los trabajos y se la bonchaba. Hasta medio millón de bolívares por asistente pedía. A otros, le solicitaba las velas y el aguardiente, y luego decía que eran adquiridos con ese dinero que él después se rumbeaba”

- ¿Y no te rebelaste frente a éso..no le reclamaste?

- “Un día que estábamos en un gran supermercado del oeste, se lo reclamé. Le dije que eso no era honesto. Y él me dijo que era una tonta. Que revisara los empaques de papel higiénico para que viera lo que él había metido adentro. Estaba robando en el supermercado con la mayor tranquilidad!!!, pero me convenció que era un mandato eso de quitarle a los que muchos tienen, para darle a otros de pocos recursos. Estaba embobada. Hipnotizada. Me había lavado el cerebro. Al llegar a casa acudimos a una sesión y allí uno de los muertos que él encarnaba me pegó…me castigó. Luego para que me perdonara me hizo tener sexo con él, poseído. Hasta me “casó” con uno de esos espíritus en una hermosísima ceremonia de flores y frutas. Yo ataviada de colores y todos los de la caravana allí"

- ¿Te pegaba cuando estaba normal o sólo en estado de posesión?
- “Solo cuando estaba poseído. Aunque cuando estaba normal me amenazaba que si no complacía al enviado de los dioses, al protegido de esos muertos me iban a castigar. Aunque después descubrí que era una farsa, porque -incluso- soy fiel creyente de uno de esos muertos y ellos son incapaces de éso. El abusaba de la fe de los demás y el nombre y poder de ellos, cotidianamente ”

- Y tu relación de pareja con él, ¿Cómo era?
- “Perfecta al principio. Hasta una hija tuvimos que hoy tiene pocos meses y no veo desde Diciembre. A la que no he podido amamantar como corresponde. A cuya ausencia no solo debo esta tristeza que me mata, si no el casi reventar de mis senos llenos de leche sin destinatario”.

- ¿Cómo es éso?
- “Bueno que tuvimos una hija, tal y como me lo había predicho en una de las sesiones, donde me dijo además que esa niña que tendríamos iba a ser mi felicidad o mi desdicha…todo iba a depender de cómo me portara con él.. Pero después que la tuvimos y que yo empecé a dudar de él, y además me negué a vivir como solo una de sus tres mujeres…me confinó en una montaña custodiada por dos de sus amigos. Sin teléfono y sin poder hablar con nadie. Allí mi hija quedó con las otras mujeres que vivían con él. Me la secuestraron, me la quitaron a la mala. Entonces me las ingenié, con la complicidad de otro de los creyentes, y pude hablar con mamá por teléfono ya que ella, madre al fin, y a pesar de mi abandono con ella…. nunca dejó de buscarme..incluso denunció a mi pareja en la policía por secuestro. Cuando se hizo la denuncia, fue que me enteré que mi pareja estaba procesada por estafa y otros delitos y estaba a régimen de presentación. Hasta unos recortes de periódicos de cuando fue aprehendido le dieron a mamá.!"

- ¿Cómo reaccionó él, cuando lo fue a buscar la policía?
- “Se asustó y me dejó hablar con mamá por teléfono y custodiada con sus amigos como le dije antes. Con mi promesa de no decirle la verdad. De solo decirle que estaba bien y que andaba viajando buscando mercancía. Pero como la llamé desde un teléfono fijo y mamá tiene un celular, ella vio el código y supo que estaba en Barquisimeto. Me hizo llegar un dinero, y me escapé. Allí comencé a hacer gestiones para recuperar a mi hija de apenas meses. Sin embargo, él se movió y a pesar de yo tener diligencias en la Fiscalía, echó un cuento de que mis hermanos y yo lo habíamos amenazado en Valencia –cuando yo estaba acá sometida en Barquisimeto- y me quitaron la niña. A mi que no tengo antecedentes sino de trabajadora para dársela a él que está condenado como delincuente. Así marcha la justicia en el estado, licenciado. ¿Cómo la vé?”

- Si es así como tú me cuentas, grave, le digo…
- “Mire, me muestra, acá están todas mis diligencias, todos mis recaudos. Lo que yo he solicitado. Y acá están los recortes de su detención. La condena del tribunal…y la asignación de la patria potestad de una niña de apenas meses, que además estaba amamantando. Ni siquiera eso ha valido frente a las instancias jurisdiccionales. Ese es un submundo –me dice- que no se maneja con justicia, si no con las más oscuros intereses. Pero voy a dar la pelea. Hay una doctora que ofreció ayudarme, y no todo puede ser malo en este país. Algún día, estoy segura, van a ganar los buenos. Y el horror que viví esclavizada, sometida por un delincuente que llegó a ser mi pareja…no lo voy a revivir en las instancias jurisdiccionales de manos de cualquier otro diablo. Dios tarda, Licenciado…pero no olvida”.

Se marcha de mi oficina y deja en el ambiente ese ambiente pesado de la impotencia, la rabia, la injusticia… de la ausencia de su hija, de sus senos a punto de reventar porque un funcionario ha prohibido tácitamente que amamante a su niña de pocos meses, al negarle la custodia de la misma y dársela a quien, según ella, tiene cuentas pendientes con la justicia.
Hoy se ha prometido a sí misma decirle adiós al miedo, a tanta falsedad recibida, a tanta frustración transitada. A enfrentar la injusticia. Que la camisa de fuerza hecha por algunos a la medida de sus angustias pueda rasgarse, dejar una brecha, abrir una rendija..por donde su corazón pueda de nuevo asomarse al mundo, sin tener que sufrir ni las propias, ni las ajenas mentiras. Hoy marcha serena, como quien se acerca al final de la oscuridad en procura de lo deseado. Con un discurso de fe y un amanecer en la existencia. Ya no le acusa la conciencia. Está segura que en alguna parte, algún funcionario corregirá el desaguisado del que ha sido víctima. Hoy en su yo más profundo, en lo más íntimo de su ser, en lo insondablemente puro del sitio de su amor de madre inventa un jardín, un mundo de caramelos, unos peces de colores, una muñeca de trapo, una cuna nueva para que con ese amor viejo que la habita y la desespera, darle fuerzas a su corta vida..esta vez, sin relámpagos ni truenos. Sin más metas que una agenda nueva, donde a sus mañanas…solo se le sume de nuevo, la vida.
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