Si les digo la verdad

(Publicado el 21.08.07)
Si les digo la Verdad
Me matan


Lic. Víctor M Barranco C

No le importa lo que piense la gente. Ni su familia. Ni los amigos. Mucho menos el qué dirán. Ella piensa que lo que pase con su cuerpo y con lo que con él pueda hacer, es solo su problema. Que la decisión sobre él, es plena, absoluta, íntimamente personal. Que no puede ser que para algunas cosas ellas tenga pleno dominio y poder de decisión sobre él, y para otras –solo porque algunos lo consideran así- no. Piensa que no es arbitraria su decisión, es solo consecuencia del entorno, de cómo vive, de lo que significa para ella traer al mundo una vida nueva. De cómo no debe dejarse al azar una decisión de tal magnitud, que debe ser fruto del amor y la responsabilidad. Porque, pregunta en su tormento, ¿qué es más grave...no tener un hijo; o traer una criatura al mundo consciente de que va pasar necesidades, hambre…y antes de nacer, contar ya con el rechazo de quienes deben quererlo? . Por ello, en el silencio que sucede a la soledad que producen las propias tristezas, ni siquiera su fe en Dios le tranquiliza. No hay norma ni amor, capaz de agotar su angustia. No hay ley que pueda solucionar favorablemente su problema. Ningún concepto religioso entiende su padecer, solo el de los principios de quienes establecen la carta de deberes de ese ente religioso. Nadie se pasea por su padecimiento, ni por ese temor de traer al mundo una vida a pasar necesidades. El placer de una relación, nunca le permitió medir las consecuencias. Un hijo, debe ser algo deseado. Un orgullo. Nunca, una maldición. Nunca, la cara más negra de la vida. La libertad, tiene muchas consecuencias cuando, quien nos la da, no nos enseña a usarla. A veces los padres obligan a los hijos a engañarlos, para que no los reprendan. Vivir en una mentira, a veces los hace felices. Y algunos ni siquiera se imaginan, qué hacen, qué han hecho, o qué son capaces de hacer sus hijas o hijos. Y en el momento de la dificultad, pocos son dados a entender, apoyar, considerar, tolerar, perdonar. Son mucho más dados a regañar, objetar, censurar, reprender, volverse intransigentes…a lo mejor sin considerar la parte de culpa que les corresponde en cada error, abuso o exceso cometido por sus hijos. Por eso ella, de 20 años, a pesar del riesgo, por encima del miedo, saltando las recomendaciones médicas, sociales, religiosas, ha decidido interrumpir su incipiente y clandestino embarazo...pero sin que papi o mami lo sepan.

- ¿Por qué abortar?
- “Porque no puedo tener un hijo en estos momentos. Primero, mi papá me mata. Segundo, cómo lo voy a mantener. Cómo lo voy a cuidar. Si todavía estoy estudiando. Además, no tengo una relación formal con quien me embarazó...salimos a la playa y ese fin de semana estuvimos juntos. Luego un par de veces más...pero hasta ahí. Nunca pensamos en matrimonio, ni en compromisos de esos que se llaman formales. Fue una noche de diversión…y hoy que lo pienso, ciertamente irresponsable”.
- Pero, si no querías salir embarazada ¿por qué no te protegiste, o se protegió él?...hoy día solo se embaraza quien quiere.
- “No es verdad. Nadie esta pensando en barrigas en esos momentos. Unas cervezas, un baile, la playa...y es algo que no planificas...se da y punto. Por ello cómo planificar?. Además, a pocos hombres les gusta usar protección. Y yo creo que la inexperiencia, es la gran culpable. La ignorancia en esa materia. La pacatería de los viejos, que tienen miedo a hablar con uno crudamente. El problema es que nadie se prepara a mi edad para tener sexo. A veces, solamente sucede. A veces,. Solamente pasa”.

- ¿Tu papá o tu mamá nunca te advirtieron?
- “Mi papá prefiere no tocar este tema conmigo, siempre le ha sacado el cuerpo...y mi mamá no entiende o no quiere entender que las cosas han cambiado, y lo que hace es molestarse antes de hablar conmigo. Pretende que hoy, vivamos de acuerdo a como ella lo hacía hace cuarenta años. Y lamentablemente para nosotros, lo de hoy hay que resolverlo con argumentos y actitudes de hoy. Porque cuando me habla de “su tiempo” ...se olvida del mío. Cuando habla de “su época” se olvida de la mía. Y pretenden que nosotros vivamos sus vidas, o lo que ellos no pudieron hacer en ellas. No quieren comprender que solo queremos vivir la nuestra. Con la ayuda de ellos, pero la nuestra. Yo pienso que desconfían de todo, seguramente porque ellos piensan que yo voy a hacer lo que ellos hicieron cuando estaban solos, y ese sentimiento de culpa no los deja ser sinceros conmigo, Reprenden en mí, lo que ellos hicieron en el pasado. Por ello prefieren callar. Regañar. Desconfiar y no explicar”.

- ¿Y la confianza…no existe entre ustedes?
- “Cómo le digo yo a mi mamá que me besé con alguien. Si lo que para mi fue tan lindo, para ella es algo menos que una cochinada??? Cómo le confieso que me hice mujer. Que equivocadamente o no, que con razón o no tuve mi primera relación de sexo sin que me agredan??. Cómo conseguir que los padres te entiendan si te equivocaste, y no te castiguen sin derecho a juicio, ni a defensa, ni a explicaciones??? No es que uno engañe a los padres, es que a veces, ellos no permiten que tú le digas la verdad. ¡Por qué vivir la vida desde su óptica, y no desde la nuestra??..o en todo caso ¿por qué no compartir las dos ópticas? ¿hasta cuándo los hijos tenemos solo deberes y no derechos en nuestras casas¿¿hasta cuándo es solo lo que ellos digan tengan o no razón, solo porque son los jefes de la casa??? Está bien, yo como hija debo ceder y comprender, y lo hago...pero ¿ellos, no?”

- ¿No piensas que con tu decisión estás cometiendo un crimen?
- “Crimen sería traer un hijo a este mundo a pasar trabajo. Crimen sería traer un hijo al mundo para que sea el centro de la discordia de una familia. Crimen sería traer un hijo al mundo para que se disuelva una familia. Crimen sería traer un hijo al mundo para que sus abuelos y tíos lo desprecien. Crimen sería traer un hijo al mundo, sin certeza de cómo vamos a poder orientar o responder por las necesidades y requerimientos de esa vida. Un hijo debe ser algo deseado, algo lindo. Un ser producto del amor, no del odio, la censura, la crítica. Algo que amemos y nos llene de felicidad. Un hijo no puede ser un ruido de angustias, un faro de tristezas. El motivo de una rabia que bien pudo evitarse.

- ¿Y tu conciencia?
- “Esa es la que me dice que debo interrumpir el embarazo. Que debo ser responsable. Que ser madre es una elección, no un accidente, no una desventurada consecuencia. Que hay que asumir la responsabilidad. Que nadie te puede obligar a hacerte daño deliberadamente. Que la mujer no solo debe tener derecho al aborto terapéutico, si no que también al aborto electivo. Porque sí yo puedo decidir traer un hijo al mundo, por que no puedo decidir lo contrario?. Hay un principio en el derecho que señala que las cosas se deshacen como se hacen..por qué no aplicarlo acá??? No hay un poco de hipocresía en ese criterio???”

- ¿Eres católica?
- “Sí, pero antes que todo soy mujer. Estudio Derecho, y sé de las legislaciones al respecto en todo el mundo. La mujer no puede ser castigada porque no desea tener un hijo. Mientras el hombre que lo engendra, si se desentiende, no tiene ninguna responsabilidad. Tampoco mamá o papá deben imponer, si acaso aconsejar...pero no lo hacen. Yo tengo una amiga, que abortó y se vio muy mal, y lejos de tener la comprensión de sus padres, el consejo de ellos, la guía para la rectificación...encontró a dos enemigos, a dos irracionales incapaces de entender, de perdonar, de tener un gesto de amor...y yo no quiero pasar por éso. Le pregunto Licenciado ¿ellos, sí son católicos? ¿ellos que no saben perdonar, si están a derecho con Dios?”

- ¿Ahora bien, cuándo disfrutabas del momento, no pensaste en lo de ahora?..¿no es irresponsable divertirse, y después no afrontar las consecuencias de esta diversión?
- “Es que ustedes los mayores son muy simplistas a la hora del análisis. Solo piensan que hay que castigarnos, porque haciéndolo si se divirtieron. Eso es trágico y hasta morboso. El objeto del sexo, casi nunca es engendrar premeditadamente. Es primero pasarla bien. Nadie cuando se entrega piensa en los hijos en ese momento. Lo piensa cuando hay una relación estable y unos medios para concebirlos sin problemas. ¿O usted es capaz de asegurar que los que engendran un hijo “con todas las de la ley” no lo hacen pensando en su placer primero? Las cosas han cambiado, y hoy el sexo no es un tabú, no es una cosa reservada solo a los casados, una o dos veces por semana. Es la reacción de entrega ante una relación, o ante una necesidad de conocerse profundamente. O a veces, como en mi caso, es la consecuencia de noches de fiesta en que, sin medirlo, pensé que me graduaba de mujer..cuando de lo que me estaba graduando era de frustrada. De madre nonata. ¿Usted cree que si yo hubiera pensado que iba a quedar embarazada, no tomo todas las precauciones?..pero, no solo pasa con el sexo..cuántas veces usted no se ha abrochado el cinturón de seguridad..muchas, creo. Pero es porque no piensa que va a tener un accidente. Uno cuando sale a una fiesta, no piensa que no va a regresar con vida a su casa..y ésa es hoy día, una muy clara posibilidad. Bien, me equivoqué. Y estoy tomando una decisión sola, autónoma..como la que tomé cuando decidí tener sexo en la playa. No espero que nadie me comprenda..de verdad que ya no lo espero. Solo espero que me dejen resolver, de acuerdo a mis posibilidades. De acuerdo a mi criterio. Porque más allá del dime y el direte, la lección está aprendida. Yo estoy pagando un precio altísimo por este error mío..solo mío. No me obliguen a que sea una criatura inocente quien pague unos platos que no rompió. Es si es inhumano. Yo prefiero abortar a tener un hijo que sea el deshonor y la vergüenza de todos”.

Definitivamente, cuando los hijos yerran, hay qué preguntarse dónde nos equivocamos nosotros en su educación. El aborto visto como una elección personal y no como una imposición de alguna regla social, es una realidad más frecuente de lo que uno cree. Ella, que apenas roza la adultez, ha tenido que inventar, buscar amigas, quién sabe a qué chamarrero para, evitando el castigo poner en riesgo su vida… solo por el pudor o el miedo a sus padres. ¿Estaremos condenando a los hijos a situaciones no deseadas, simplemente por que no hemos abordado con sapiencia sus problemas? La vida, va embadurnando de grises lo que para algunos solo es blanco y negro. Los hijos, van señalando un camino distinto al nuestro, pero que en algún momento debemos conocer, así de primeras no lo entendamos. El manchar los cuadernos, el hacer explotar sus fantasías de chocolates… es mucho más grave que hacer saltar la vida de un vientre que se gradúa de mujer, no cuando tiene su primera relación sexual, ni cuando se embaraza...sino cuando pudiera cometer crimen o eutanasia, y no para salvar su vida...sino, para salvar la honra..o en todo caso la apariencia de niña buena ante unos padres que, frente a la verdad cruel...prefieren ser engañados, pero vivir felices.
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Las Últimas Máscaras dijo...

amigo victor barranco muy interesante su blog felicitaciones y sobre este tema le dire que sucede muy a menudo x el libertinaje y los tabu que nuestros padres nos levante entre otros motivos de verdad felicitaciones continue adelante